Te odio, te quiero, te amo..

Intento convencerme de que no te necesito, pero entonces me doy cuenta de que es algo sin sentido tachar una verdad.
Te veo; me paro; te miro; te odio.
Odio cada uno de tus gestos, odio tu forma de andar, de sostener esa copa de alcohol, odio la manera en la que te sientas y la puta mania de estar siempre alli.
Te odio; me miras; te odio; te odio; te odio...
Odio tu sonrisa, la suave brisa culpable del maldito recuerdo de tu perfume.
Odio tener que pasar por tu lado, odio cuando me quedo esperando una puta señal, un gesto sencillo, una simple mirada.
Te miro otra vez.
Me hundo, me rindo, me voy, te quedas...
Al fin el final.
No vienes, me paro, me canso.
Uso todo aquello que está por revelar.
Me giro, te miro, avanzo, te quiero abrazar...
Me frenan, me obligan, doy un paso atrás.
Te miro, no quiero llorar.
Me giro, te añoro... me vuelvo a marchar.